¿Me ayudarías a reconstruir nuestro mundo?
Cómo cambiar el rumbo de nuestro planeta y contribuir a un mundo sostenible. En este post comparto con ustedes el manifiesto de Casa Lefay y los invito a reconstruir la forma en que nos relacionamos con la Tierra. Tenemos un papel como guardianes de la naturaleza y siguiendo estos principios podemos empezar a tener un impacto.
Estamos aquí juntos, quizás no todos nos crucemos en el camino, pero vivimos en el mismo tiempo. El planeta nos sostiene sin importar las fronteras y leyes que hemos creado para dividirnos. La naturaleza continúa alimentándonos, dándonos aire para respirar y agua para beber. Todos, de una forma u otra, sabemos que la configuración actual del mundo tal como es, no está funcionando. Muchas veces nos sentimos pequeños e impotentes ante grandes injusticias, desastres y guerras que sin darnos cuenta terminamos refrendando.
Sin embargo, quiero pensar que si estamos aquí y tenemos la corazonada de que es posible un mundo diferente, no hay ninguna razón por la que no debamos empezar hoy a reconstruir nuestro mundo.
Por eso quiero compartir con ustedes el manifiesto de Casa Lefay, con la esperanza de que se sientan inspirados y animados a ayudarme.
Nos movemos con el mismo ritmo que se mueve el sol cuando se esconde detrás del océano. Vamos despacio, no producimos en masa, navegamos tranquilos tejiendo historias. Sabemos que las cosas más importantes requieren dedicación y tiempo.
Creemos que todos somos hermanos, merecemos respeto, consideración e igualdad. Todas nuestras creaciones se basan en el comercio justo. Considerando que todos merecemos reconocimiento por el trabajo que realizamos, no apoyamos ningún tipo de trabajo esclavo, abogamos por la dignidad y libertad de todos los seres vivos.
.Somos parte del gran equilibrio del universo. Todas las acciones que tomamos afectan a los demás ya nosotros mismos. Entonces, todo lo que hacemos y todo el impacto que causamos no debe perturbar el orden natural de la Tierra. Cada pequeño gesto que deberíamos poder replicar una y más veces minimizando el impacto. Sabemos que es un camino largo, en el que no tiene sentido satanizarnos o señalarnos con el dedo, todos lo estamos intentando, nada es perfecto, pero vamos avanzando.
Somos uno con la Creación. Tenemos el deber de ser amigos de cada una de las plantas, animales, agua y rocas pertenecientes a nuestro planeta. El aire que respiramos es un soplo de vida, es nuestra misión protegerlo y salvaguardarlo para nosotros y para nuestras futuras generaciones. Debemos minimizar el impacto que tenemos en la Tierra durante la creación de cualquiera de nuestros productos.
Por último, pero no menos importante, todo lo que hacemos debe hacerse con amor. El amor debe ser siempre la guía de nuestra vida, nuestra mayor inspiración y nuestro mayor anhelo. Todas nuestras creaciones deben ser portadoras de amor, de lo contrario serán creaciones vacías y sin valor.
¿Qué estás diciendo? ¿Te atreves a reconstruir el mundo conmigo?
Si la respuesta es SÍ, envíame un pequeño mensaje aquí